Si hace tres años nos hubieran dicho que el Club Voleibol Pinto iba a estar a un paso de certificar la permanencia, a falta de cuatro partidos, por tercer año consecutivo en Superliga 2 masculina nos hubieran tildado de locos. Pues este hito es lo que está a punto de suceder tras la victoria en Almería del equipo que dirige Jordi Martínez.

Miguel Ángel Sánchez Ponce, presidente y exentrenador del primer equipo masculino, lo tuvo claro. La entidad había crecido tanto que no podía abarcar ambas parcelas. Por este motivo, dio las riendas al equipo a Jordi Martínez, que hasta entonces era componente del primer equipo. Una persona preparada, con experiencia como entrenado y lo más importante, conocedor del vestuario y de la categoría. Los ingredientes eran bueno y como, casi todas las decisiones que toma Sánchez Ponce, acertó.

El entrenador vallisoletano ha sabido sacar lo mejor de cada jugador. Aunque es un equipo joven, la unión dentro del vestuario y la incorporación de una mezcla de veteranía y juventud ha vuelto a obrar el milagro. La victoria en el Palacio del Mediterráneo de Almería no es una victoria cualquiera, ni tres puntos más. Es el resultado del trabajo bien hecho de un equipo que puede con todo.

Un equipo ascendente

El Club Voleibol Pinto es una pequeña gran familia.

El coronavirus no les sentó nada bien al equipo pinteño. El inicio de liga auguraba una temporada desastrosa. Pero poco a poco, como las hormiguitas, el míster del Club Voleibol Pinto supo dar con la tecla. En verano, llegaron al equipo jugadores muy jóvenes pero con gran proyección como Antonio Burruel o Adrián Romera. También aterrizó en Pinto Alex Carretero, procedente del Salesianos San Miguel. Un jugador que se ha convertido en una de las sorpresas de la temporada gracias a su gran rendimiento y versatilidad.

Posteriormente, en el mercado invernal, la entidad peinó el mercado buscando equilibrar todas sus líneas. Llegaron al equipo Marcelo Calderón, desde el  voleibol catalán y Raúl Gómez, un jugador procedente del Club Voleibol Leganés, que ha aportado la experiencia necesaria y saber estar en los momentos decisivos que necesitaba el equipo.

La salvación pasa por Madrid

La unión hace la fuerza, es el ADN del equipo pinteño.

Al Club Voleibol Pinto (5º) le quedan cuatro partidos, dos de ellos ante rivales directos. De los tres enfrentamientos tres son ante rivales madrileños, el Club Voleibol Leganés (3º), el VP. Madrid (6º) y el Collado Villalba (8º).

En este momento los pinteños tienen 5 puntos sobre los puestos de descenso, un colchón que debería ser suficiente para salvar la categoría y competir por cuarto año consecutivo en Superliga2. Todo un milagro por letras mayúsculas para una entidad que posee uno de los presupuestos más austeros de la categoría con diferencia.

El objetivo dentro del vestuario es lograr el objetivo de la permanencia lo antes posible. La próxima semana reciben al equipo tinerfeño del Cisnero Alter, que se está jugando el ascender a la máxima categoría del voleibol español. Un rival muy duro que está un peldaño por encima de los pinteños por plantilla y presupuesto. A pesar de ello, los pinteños saben que son capaces de todo.

Por ello, los enfrentamientos frente al VP. Madrid en su cancha y la visita del Collado Villalba en el pabellón Príncipes de Asturias de Pinto son clave para sellar la permanencia antes de la jornada final frente al Club Voleibol Leganés.

El Covid no ha podido con el Club Voleibol Pinto

El Club Voleibol Pinto se ha convertido en una de las mejores canteras del voleibol madrileño.

A pesar de la grave crisis que ha causado la llegada del coronavirus, la entidad pinteña , presidida por Sánchez Ponce, ha sabido adaptarse a la situación y reinventarse para seguir trabajando con todas las medidas higiénico-sanitarias que requiere la situación.

El club pinteño se ha convertido en uno de los clubes referentes a nivel cantera de la Comunidad de Madrid. Tiene equipos femeninos en la máxima categoría en alevín, infantil y cadete. El juvenil está luchando por el ascenso. Lo que es un ejemplo del trabajo bien hecho.

El objetivo del club es lograr esto mismo en categoría masculina, aunque son conscientes que en Pinto los más jóvenes prefieren otros deportes como el fútbol, que copa un gran porcentaje. Por este motivo, uno de los proyectos que han lanzado es una escuela específica destinada a los más jóvenes, que complementa a la escuela de equipos femeninos.

Los dirigentes del club saben que el futuro del Club Voleibol Pinto pasa por cuidar y mimar a la cantera.

El resultado del lanzamiento de esta escuela destinada a los pinteños más jóvenes ha sido muy satisfactorio. “Hemos tenido una acogida muy positiva. Era un reto que nos marcamos para fomentar el voleibol entre los más pequeños del municipio y ha día de hoy tenemos el 90% de plazas ocupadas”, reconoce el presidente de la entidad Sánchez Ponce.

Si hablamos de la escuela destinada a equipos femeninos, este año ha sido la primera vez de la historia del club que hay lista de espera. Es una pena no poder contar con más instalaciones para poder aumentar los equipos de la escuela, pero es un dato muy satisfactorio que tantas chicas quieran jugar al voleibol con nosotros. Eso denota que las cosas se están haciendo bien y es una gran satisfacción para todos los miembros que componemos la gran familia del Club Voleibol Pinto”, afirma a ePinto el presidente de la entidad pinteña.

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