Cuando era chiquito, al escuchar la radio, ver la televisión, o leer un artículo periodístico, me llamaba la atención el rico lenguaje utilizado por los narradores de efemérides, principalmente de fútbol, que es lo que más que he visto o escuchado. Y es que la crónica, la gacetilla y los comentarios han jugado un papel estelar en la difusión del deporte a través de estas personas que leían, escribían o narraban acontecimientos deportivos, creando relatos épicos que los oyentes, y o espectadores consumían ya como un hábito cotidiano. Qué bonito era sentarse junto al transistor e imaginar cómo era todo aquello que narraban y se representaba en mi imaginación.

En los años cincuenta, Boby Deglané, chileno, crea el programa radiofónico “Carrusel Deportivo”, asentándose en la parrilla radiofónica hasta la fecha con conexiones en directo y las míticas frases de “ronda informativa” y “tiempo de juego y resultado”. Hace poco dejó de oírse la inconfundible voz de Pepe Domingo Castaño y su “hola, hola”, que daba comienzo a “Carrusel Deportivo”.

Los medios de la época se hacía eco de las historia de pinteños como Amelia del Castillo.

En los años setenta, a aquellos que nos apasiona el fútbol, nos sugestionaba con su verbo desbordado y su facilidad de palabra, de locutor radiofónico en Radio Nacional de España y las retransmisiones en RTVE, don Matías Prats Cañete, haciendo las delicias de los radioyentes y telespectadores. Valga el recuerdo de don Matías Prats Cañete, como homenaje a todas esas conocidas voces de las narraciones deportivas, entre las que destaca, asimismo, como periodista y presentadora, María Escario, premiada por el Ayuntamiento de Pinto en la I Gala del Deporte, en abril de 2011, María tiene una reconocida trayectoria profesional, ha estado presente en siete retransmisiones de los Juegos Olímpicos y tres Mundiales de fútbol, entre otros muchos acontecimientos.

El terremoto radiofónico lo generaría un singular personaje, a quien por otra parte, era un deleite escuchar, José María Garcia, precursor de la radio deportiva a medianoche, en el espacio de “Hora 25 deportiva”, esa voz inconfundible, crítico feroz, capaz de enfrentarse a persona muy relevantes de la época y verbalizar sus conocidos latiguillos, chascarrillos y expresiones coloquiales: «¡Ojo al dato!», «el tiempo es ese juez supremo que quita y da razones», «esto es de juzgado de guardia», «caducos y trasnochados», «el deporte español está lleno de estómagos agradecidos, lametraserillos y abrazafarolas», «correveidiles», «el rumor es la antesala de la noticia», «chupópteros», «soplagaitas», «bulto sospechoso», «meapilas»  «monta un circo y le crecen los enanos», «emperadores del comer y catedráticos del beber», O, las expresiones de sus  compañeros de radio «atencioooón Madriiií», o el mítico ”¡Gol en las Gaunas!”.  

La moviola surgió en la temporada 1972/73, con la creación en TVE del programa ‘Estudio estadio’ que ofrecía los resúmenes y los goles de los partidos de la jornada. “Pedro Ruiz [primer presentador del programa] salió con un aparatito con dos manivelas sobre la mesa, del que explicó que se llamaba moviola y para lo que servía: esencialmente repetir las imágenes polémicas de cada partido y evaluar el nivel de acierto en las decisiones arbitrales”, explica Alfredo Relaño. Aquello fue un éxito total. La calidad de las imágenes fue mejorando y se contrató a Ortiz de Mendívil, árbitro retirado, para efectuar los juicios. En la foto, un operario maneja la moviola de montaje en las instalaciones de Televisión Española en Prado del Rey.

También se recuerda con una media sonrisa, los gazapos lingüísticos, expresados adrede o inexactos por la pasión y la apresurada velocidad a la que hablaban los locutores y colaboradores en las retransmisiones: Gol «a balón parado«, ya que si estuviera estático nunca podría colarse en ningún sitio, o «dispara con su pierna derecha» como si se hubiera la posibilidad de jugar con una pierna ajena. El uso de palabras comodín que suprimen matices significativos: «finalizar« para sustituir a acabar, terminar, concluir o dar fin, «veracidad« para reemplazar a credibilidad o crédito, «perdonar» por fallar o «vendetta» en lugar de desquite. El personal antidopaje en un «vampiro», a la bicicleta aerodinámica para la contrarreloj en una «cabra», al tapón del baloncesto en un «sombrero», a la zona en la «bombilla», al escalador colombiano en «escarabajo», al cartel reversible del automovilismo en un «chupete», a un delantero de fútbol en un «puñal» y si juega sólo en punta en el «abrelatas», a los pases imprecisos en «pedradas», «melones» o «sandías», al semicírculo del área en «media luna», «corona» o «balcón», a través de los cuales se buscaba cumplir la triple función del periodismo: informar acerca de los resultados y novedades de la jornada; formar, aportando al lector conocimientos acerca del deporte y sus particularidades; y entretener, utilizando, para ello, fórmulas muy diversas. (Fuente: Idiomaydeporte.com).

Sin perder el hilo de la narración, conviene rechazar algunas expresiones que manifiestan profesionales del periodismo deportivo, dirigentes de clubes y deportistas, en los medios de comunicación, que a veces va en contra de la propia esencia del deporte, en la que se presuponen valores de respeto hacia el adversario y sus semejantes.

La historia del deporte de Pinto es uno de los tesoros mejor guardados.

En Pinto el legendario medio de prensa escrita (ZigZag) publicó “Medios de comunicación pinteños” en la sección de “Pinto y su historia” en su revista impresa (y digital) que vale la pena releer. Actualmente, además de esta publicación impresa está la revista municipal que da información deportiva y  existen otras en versión digital como ePinto , La Voz de Pinto o Soy de Madrid. Además, de las páginas web y redes sociales de las entidades deportivas pinteñas.

Desde mi sección, me gustaría que nos contaras las frases memorables que recuerdes en radio y televisión.

José Juan López Cuchillo.

El Rincón de Cuchillo (ePinto)

Fotos: José Juan López Cuchillo / Diario AS.

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