Hablar del maestro pastelero Justo Almendrote es hablar de un pinteño de pura cepa. De los que llevan el nombre de su Pinto natal con orgullo por todo el mundo. Con mucho trabajo y sacrificio ha logrado hacerse uno de los mejores pasteleros dentro y fuera de nuestras fronteras. Hoy sigue cosechando grandes elogios y reconocimientos, todo ello sin perder su naturalidad y sin olvidar sus orígenes.

Se crio con el “chusco de pan que te daban y le quitabas la miga para meter el pedazo de chocolate”, lo que el define como el “phoskito de los pobres”. Pero desde entonces, un premio Guinnes (la estatua de chocolate más alta del mundo), preparador, profesor, embajador, infinidad de premios e incluso ha colaborado en diferentes programas de televisión. Sin duda una carrera llena de éxitos que no le han hecho alejarse de sus amigos de toda la vida. Las quedadas con su pandilla se siguen repitiendo como cuando eran quinceañeros.

Su próximo reto, elaborar un turrón solidario de 40 metros el próximo viernes, 13 de diciembre en el Complejo comercial Nassica. Todos los beneficios irán destinados a la AMP Pinto y la Fundación Villa y Corte del Chocolate.

¿Te lo vas a perder?

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí