Pinto se ha convertido en la cuna de grandes corredores populares, que llevan el nombre de nuestro municipio por todos los rincones de la geografía española. Un hecho que se ha multiplicado en los últimos años. No es extraño salir a pasear por algunos de los numerosos caminos que rodean nuestra querida villa y encontrarse a algún corredor.

Hace unos meses os contamos la historia de nuestro querido vecino Andrés Sánchez, uno de los ocho atletas que ha corrido todas las ediciones de la Maratón de Madrid desde 1978. Hoy en la, recién estrenada, sección de “Pinteños sobresaliente” os traemos la historia de Francisco Araque Lebrón, un vecino de Pinto que se ha convertido en el número 1 en la mítica prueba de ultrafondo de los 100 KM Madrid – Segovia. Una prueba que comenzó en 2009 y que el pasado sábado, 18 de septiembre, celebró su 13ª edición.

El MVP de la Madrid – Segovia

Fran Araque junto a numerosos vecinos que Pinto en una de las ediciones de la Madrid – Segovia.

Este año, el pinteño Fran Araque culminó su decimosegunda Madrd – Segovia. Una proeza que solo han logrado finalizar ocho corredores y entre ellos, Araque es el más regular, lo que le ha servido para lucir el dorsal 1, que la organización le reserva en cada edición. Un distintivo que pone en valor la grandeza de este deportista popular, que vive cada Madrid – Segovia como si fuera una final de Champions League. “Para mí es una carrera muy especial. Cada año afronto la Madrid – Segovia como un reto. No a la hora de hacer mejor tiempo porque eso es muy complicado, sino el reto de acabarla, aunque siga cumpliendo años y ya van 56 primaveras”, reconoce el pinteño.  

Fran suele finalizar estos más de 100 kilómetros que separan Madrid de Segovia en unas 12 o 14 horas. Un tiempo modesto si lo comparamos con el campeón de este año, que finalizó la prueba por debajo de las 8 horas, pero que no es nada fácil. La dureza de la prueba, que recorre vías pecuarias y, sobre todo, la fortaleza mental son dos de las claves para llegar a la ciudad del cochinillo por excelencia. “Lo más importante es saber controlar la cabeza. En muchas ocasiones si eres capaz de superar las barreras que te va colocando la cabeza, eres capaz de llegar hasta donde te propongas y eso es, quizás, lo más importante para afrontar una prueba de ultrafondo como es la Madrid – Segovia”, analiza con ePinto Fran.  

Emotivo abrazo entre Fran y su amigo Miguel Ángel en la décima edición de la Madrid – Segovia.

Durante la entrevista, llegamos a uno de los momentos más emotivos para nuestro protagonista. Antes de la pandemia, en la décima edición de la prueba (2019), Fran vivió una de las ediciones más emotivas. Para él siempre quedará en su recuerdo, ya que fue la última que pudo compartir con uno de sus mejores amigos, Miguel Ángel del Prado, que meses después nos abandonaría debido a una enfermedad. “La mejor para mí fue el décimo año. Esa edición logré mi mejor marca personal (11 horas y 49 minutos). Fue un año que me acompañó mucha gente y fue el último año que pudo venir Miguel Ángel del Prado, un amigo que me acompaña todos los años y ese fue el último que pudo venir. Para mí siempre será una edición muy especial y siempre quedará en mi corazón por todo lo que ha significado a nivel personal”, rememora emocionado Araque.

Entre nombre y nombre, aparece el de Iván Torres, una persona muy querida por Fran del que habla maravillas. Afirma que para él es más que un amigo, lo califica como “ese amigo que siempre está”. Tampoco se quiso olvidar de Pedro Hervás, otro de sus grandes compañeros que falleció tras la pandemia. Por ello, este año quiso homenajear tanto a «Miguelón» como a “Pedrito” durante la carrera con una equipación donde se podían leer sus nombres.

Equipación con la que corrió en la edición de 2022 Fran Araque. Un equipación donde quiso homenajear a sus dos amigos «Pedrito» y «Miguelón», que le acompañan en todas sus carreras desde el cielo.

Fran Araque, pinteño de raza

Si buscáramos una definición de “pinteño” en el diccionario de la RAE, seguro que nos encontrábamos con una foto de Francisco Araque Lebrón. Un vecino que hasta los apellidos tienen gran arraigo en el municipio de Pinto. Nació hace 56 años y vivió en el popular “barrio de Creus”, una zona que podríamos situar actualmente entre las calles San Antonio y San Ildefonso. Tras pasar por el Colegio de las Teatinas, Onésimo Redondo (ahora rebautizado como colegio El Prado), la Casa de la Cultura dio el salto al mundo laboral siempre vinculado al mundo de las artes gráficas en Pinto.

Desde muy joven se acercó a todos los deportes que había en el municipio. Jugó al fútbol sala, al baloncesto, al voleibol y de la mano de Antonio Alcázar se introdujo en el mundo del balonmano. “Para mi (Antonio) Alcázar es como un padre. Me inculcó los valores del deporte y tuvo parte de culpa que siempre tuviera el gusanillo de practicar deporte. Es una persona que ha hecho mucho por el deporte en Pinto y por la práctica del balonmano. Ha ayudado a mucha gente. Yo guardo muy buenos recuerdo y le tengo mucho cariño”, rememora Araque de sus inicios en el deporte.

Actualmente comparte carreras con sus compañeros del Club Requiebros y Tronchas, y del Club Running Pinto. Una sinergia que le permite entrenar largas distancias por los caminos y trabajar la técnica y la fuerza en la pista del estadio municipal Rafael Mendoza.

Nunca es tarde si la dicha es buena

En la treintena, le dio por comenzar a correr de la mano de Juan José Martín Ramos, un vecino de Pinto que practicaba el ultrafondo. Poco a poco Fran fue cogiendo el ritmo al atletismo y las distancias de la carrera que realizaba aumentaban hasta que, en 2004, dio su gran salto y participó en la prueba no competitiva de los 100 KM en 24 horas de Madrid.

Posteriormente, hizo piña con otros pinteños como Carlos Aguado, Luz Pérez, que junto a Juanjo, entre otros pinteños, se liaron la manta a la cabeza y en 2009, se inscribieron en la exigente prueba del “Marathon des Sables”, considerada como una de las carreras más duras del mundo. “Fue una experiencia muy dura pero increíble a nivel personal. Es una carrera que transmite muchos valores y sensaciones que no se pueden describir, sensaciones que nunca has vivido”, confiesa Araque sobre aquella experiencia.

Una de las suertes que he tenido fue conocer a Juanjo, Carlos, Luz o Iván Torres, entre otros. Personas con un gran corazón y con una pasión común el ultrafondo. Juanjo me metió el gusanillo de correr y me hizo creer en mí. Luego el hacer grupo, sentirse cómodo es fundamental porque al final también conlleva un sacrificio que no todo el mundo está dispuesto a desempeñar”, comenta a ePinto el deportista pinteño.

Tras ello, las piernas del atleta pinteño se conoce la mayoría de las grandes competiciones de ultrafondo de nuestro país entre las que no faltan, las 101 KM de la Legión en Ronda, los 100 KM de Vallecas, el GTP Peñalara, las 24 horas en pista de Barcelona o las 24 horas de Vigo, entre otras.

Por si fuera poco, junto a Carlos y, otro de sus compañeros de fatigas, Fulgen, hicieron realizar la prueba de ultrafondo “24 horas de Pinto”. Una prueba deportiva que se desarrolla en el Parque Municipal de Pinto y reúne a varios de los mejores atletas españoles de la modalidad. Por el momento se han realizado tres ediciones y tras la pandemia, esperar recuperar una prueba que había colocado el nombre de Pinto en el mapa del ultrafondo internacional.

Una enseñanza que debe imperar en las generaciones de futuro

Si hay que destacar algo por encima de todo sobre Fran Araque esa es su sencillez. Una persona campechana que antepone los valores que le ha dado el deporte, ante todo. Palabras como “respeto”, “educación”, “sacrificio”, “superación”, “constancia”, “esfuerzo” … salpican su discurso. En definitiva para Fran Araque el deporte tiene un significado superlativo y es parte de  su vida, junto a su familia y amigos.

El deporte es algo que aporta mucho a la vida. Solo puedo decir a los más jóvenes que practiquen deporte, el que sea. Que tengan hábitos saludables a través del deporte porque ese aprendizaje va a ser esencial para su futuro, la mejor motivación y la base de una vida donde los valores sean pieza esencial”, concluye el número 1 de la mítica prueba 100 KM Madrid – Segovia.  

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