
En la historia educativa de Pinto hay nombres que trascienden el tiempo, y uno de ellos es, sin duda, el de María del Rosario Sánchez Pérez, la maestra que dedicó cincuenta y un años a formar a varias generaciones de pinteñas y pinteños. No nació en el municipio, pero su vida quedó unida para siempre a él desde que, el 3 de junio de 1884, tras sus oposiciones, fue destinada a la escuela de niñas de la calle Hospital.
Durante décadas, María del Rosario fue mucho más que una docente: fue referente, guía y presencia constante en la vida del vecindario. Participó en iniciativas solidarias, como la recogida promovida por Rosario de Acuña para las víctimas del cólera en Murcia, y vivió la evolución de las escuelas públicas de Pinto en aquellos años de profundas transformaciones sociales.
Su magisterio abnegado, ejercido con rectitud y entrega, fue reconocido oficialmente en los años finales de su carrera. El 18 de enero de 1935, el Ayuntamiento de Pinto —en plena Segunda República— la declaró Hija Adoptiva de la Villa, reconociendo así a la mujer que había educado a tres generaciones, dejando una huella imborrable en cientos de familias.
El homenaje público se celebró el domingo 24 de marzo de 1935, en un acto que revistió una solemnidad extraordinaria. El pueblo entero se volcó con su maestra. Acudieron representantes institucionales de primer nivel: el diputado Sr. Heredia, el concejal Sr. González, el gobernador civil Francisco Javier Morata Pedreño —que le estrechó la mano desde el balcón del Ayuntamiento ante la emoción de los presentes— y el presidente de la Diputación de Madrid, José Noguera.
Los discursos, aplaudidos con entusiasmo, subrayaron la dedicación, el esfuerzo y la constancia de una mujer que había hecho de la enseñanza su vida.
Aquel día Pinto también decidió que la memoria de María del Rosario quedara inscrita para siempre en su callejero. La antigua calle del Arca, testigo de leyendas sobre el centro geográfico de la península, pasó oficialmente a llamarse calle maestra María del Rosario, nombre que mantiene hasta hoy.
UN LEGADO VISUAL DE UNA JORNADA HISTÓRICA
El vídeo que acompaña este artículo recupera parte de ese legado visual. Ha sido elaborado a partir de fotografías históricas de la protagonista: comienza con una imagen de 1888, donde aparece acompañada de sus alumnas, y continúa con otras dos instantáneas posteriores que muestran distintas etapas de su larga vida docente. A estas se suman varias fotografías del acto oficial celebrado en Pinto con motivo de su homenaje. Gracias a la inteligencia artificial, estas imágenes fijas han cobrado movimiento y acción, permitiendo recrear, con una nueva mirada, aquella jornada que marcó para siempre la historia del pueblo.
Tras su jubilación, María del Rosario permaneció siempre unida al municipio. Falleció el 19 de enero de 1950, un día antes de su 85 cumpleaños, y descansa en el cementerio municipal junto a sus padres y a su hermana Celia.
Su historia es la historia de una maestra que, sin haber nacido en Pinto, hizo de Pinto su hogar y de la educación su legado. Y este vídeo quiere recuperar, casi un siglo después, aquel emocionante día en el que todo un vecindario agradecido se reunió para decirle gracias.
- Para más información sobre la maestra María del Rosario consultar el libro «De Pinto, mi reina«.



