
En ePinto somos muy fans de la buena gastronomía, en especial la elaborada por chefs pinteños. Entre ellos está nuestro querido Rubén López Mesa. Un vecino pinteño que cambió en 2009 el buzón amarillo de la popular calle Méjico, del barrio de Buenos Aires, para ser uno de los chefs españoles más populares en Australia.

Su historia la descubrimos en uno de los primeros capítulos de la sección de “Pinteños por el mundo (PxM)” allá por marzo de 2020. Ya ha llovido desde entonces. Pero realmente Rubén podría ser el protagonista de varias de las secciones que tenemos en ePinto como “Pinteños sobresalientes”, debido a su trabajo tenaz y en constante innovación, que le han llevado a triunfar en el mundo de los fogones siendo un auténtico embajador gastronómico y cultural de la villa de Pinto.

Durante este tiempo ha ido creándose un nombre, ha recibido varios reconocimientos, ha emprendido a través de su proyecto “A table of 10” e, incluso ha sido protagonista en el popular programa del canal público de televisión SBS, “The Cook Up with Adam Liaw”. Además de todo ello, antes de acabar el año la asociación “Eat Spanish”, integrada por 66 cocineros españoles en Australia y creada, entre otros, por nuestro pinteño en 2018, ha recibido el premio Malaspina. Un galardón de gran prestigio y reconocimiento que otorga la embajada de España en Australia junto con la Asociación de Investigadores españoles en el Australia/Pacífico (SARP). La entrega tuvo lugar el pasado 9 de diciembre en el Australian Academy of Sciencie de Camberra. Este premio reconoce anualmente a entidades que favorecen e implementan la relación entre España y Australia a través de la cultura, la ciencia o la tecnología. En esta ocasión fue la actual presidenta de “Eat Spanish”, Ana Cortés, y la secretaria en la entidad, Pilar Pérez Mckay, las encargadas de recoger el galardón como representantes de la entidad gastronómica.
Rubén López Mesa, un “arquitecto” capaz de construir un puente gastronómico entre España y Australia a través de Eat Spanish

El último año para el chef pinteño, Rubén López Mesa, ha sido increíble y comienza el 2025 con mucha ilusión y ganas de seguir creciendo en lo profesional y personal. Para él es muy importante su familia, un pilar fundamental en Orange, lugar donde reside.
Hace unos días, un lunes cualquiera, sobre las 20:30 horas, ePinto contactó con el pinteño, en lo que iba a ser una charla de café a través de la aplicación WhatsApp. La conversación comenzó con una gran alegría por parte de Rubén, que por unos momentos su mente se trasladó, como por arte de magia, a una de las recurrentes cafeterías que pueblan el casco urbano de su querido Pinto. De fondo, la melodía de los pájaros, que daban los buenos días a nuestro vecino, que justo se acababa de levantar para atender a ePinto. No debemos olvidar que allí eran las 6:30 horas, eso sí, de un día más. El cambio horario, sumado a las nuevas tecnologías hacían que la conversación se tiñera de un halo de magia entre dos pinteños, que se encontraban a 17.471 km exactamente.

La charla comenzó repasando un gran 2024, pero realmente podemos hablar de una aventura que comenzó en 2009 y no para de quemar etapas, donde el éxito ha estado presente en la mayoría de ellas. Rubén López se siente muy orgulloso de ser uno de los “padres fundadores” de la entidad gastronómica “Eat Spanish”, por haber logrado poco a poco introducir parte de la cultura española en Australia. “Cuando en 2018 creamos Eat Spanish nuestro objetivo era poner en valor la comida española en Australia. Apenas se conocía y lograr traer un trocito de nuestro país aquí para que se conozca y se valore es algo increíble y muy gratificante para todos los que formamos parte de la asociación. Además, hemos logrado crear un puente gastronómico entre España y Australia que no existía hasta entonces”, reconoce a ePinto Rubén.

Tras recibir el premio Malaspina, uno de los premios más importantes que un español puede recibir en Australia, el pinteño espera que sea un punto de inflexión y la visibilidad sea aún mayor: “Ojalá que este premio nos de más visibilidad y oportunidades…porque la riqueza a nivel gastronómico y cultural es increíble. Nuestro objetivo sigue siendo que las relaciones entre España y Australia sean más fluidas porque somos iguales. Nos gusta comer bien, disfrutar con la familia y amigos…”
“Las opciones son infinitas. Poner en valor las dos culturas y trazar puentes en ambos sentidos es posible. Poner en valor los productos de ambos países es uno de los nexos más prometedores entre ambos países a través de la gastronomía”, apuntilla el chef Rubén López Mesa.
Eat Spanish, la historia de un sueño que comienza a florecer

El pinteño reconoce que uno de los éxitos para que la gastronomía se vaya conociendo poco a poco en el otro lado del mundo ha sido “Eat Spanish”. Con el paso del tiempo, esta entidad sin ánimo de lucro ha ido creando sinergias entre cocineros españoles para lograr un engranaje perfecto y conseguir su principal objetivo: dar a conocer la gastronomía española en Australia.
“Los inicios de Eat Spanish fueron complicados. En 2018 éramos muy humildes. Junté a siete cocineros que estaban en Australia, los “padres fundadores” del proyecto. Al principio, nadie apostaba por nosotros y poco a poco, con mucho trabajo, implicación de todos y tenacidad, fuimos creciendo y logrando visibilidad. Podemos decir que el germen de Eat Spanish fue el momento que hicimos aquella primera llamada entre los fundadores. Fue un gran momento que recordamos con mucho cariño entre todos”, recuerda Rubén, que se emociona al rememorar aquellos momentos hace casi siete años.
Pero tiene claro que este proyecto tiene mucho más recorrido y capacidad de seguir creciendo. La charla se llena de anglicismo como “Global” o “Networking”, en un alarde de visión comercial y un mar de oportunidades para personas con actitud, como es nuestro protagonista. Asimismo, hace pocos días lanzó su nueva página web.

La idea de Eat Spanish es una idea global como reconoce nuestro protagonista: “Eat Spanish es un proyecto global. Poner en valor la diversidad de la gastronomía española y ser capaces, a todos los niveles, y estar orgullosos de la comida y cultura vasca, gallega, catalana, andaluza… Debemos hablar de nuestro país en global, porque pocos países en el mundo tiene la rica diversidad que existe en España. Hay que poner en valor la grandeza que tenemos en España. Verbalizarlo y llevarla a todos los rincones del mundo porque muchas veces no lo valoramos como se merece”.
Paralelamente, también hay tiempo para hablar de su día a día. Nos confiesa alguno de los éxitos que esconde “A table of 10”, su proyecto personal, que se ha vuelto muy popular y le ha consagrado como uno de los chefs privados más conocidos del país: “A table of 10, es un concepto donde yo soy el guía de un viaje gastronómico por España a través de 16 platos. Es como viajar a España sin salir de sus casas. La experiencia dura unas tres horas y la verdad es que es una delicia poder disfrutar junto a los clientes de un concepto tan innovador como el que propone ‘A table of 10’ porque aunamos historia, tradición y una mezcla de magia en una presentación donde la historia es el hilo conductor de una vista por la España más natural y auténtica”.
Se nota que Rubén ha convertido su pasión por los fogones es una auténtica oda a la gastronomía española a través de ‘A table of 10’. Arte, cultura y turismo gastronómico en un solo menú.
Rubén López Mesa, el artista que aúna la gastronomía y la historia de Pinto

También hubo tiempo para recordar aquella primera entrevista en ePinto, casi cinco años atrás. Rubén que ha demostrado ser un auténtico embajador de Pinto, no ha dudado en poner en valor a su querido pueblo a través de sus publicaciones y ahora también a través de su trabajo en ese viaje por la gastronomía española a través de su proyecto “A table of 10”, donde Pinto tiene su rinconcito.
Asegura que sigue la actualidad de Pinto a través de las redes sociales. Se confiesa seguidor de las publicaciones de ePinto y de los libros sobre la historia de nuestro municipio, entre los que destacan los publicados por nuestro compañero e historiador, Mario Coronas. Le encanta mucho descubrir datos sobre la historia de Pinto y en ocasiones los relaciona con algunos de sus platos, algo innovador y creativo de un auténtico enamorado de su pueblo como es Rubén.

Durante la charla surge el nombre de otro destacado chef pinteño, José Luis Adán, con quien mantiene una estrecha relación, ya que, casualmente, eran vecinos de portal y se conocen de toda la vida. Habrá que investigar qué ocurre en la calle Méjico, de donde han salido tres de los mejores chefs pinteños de la actualidad, Rubén López Mesa, José Luis Adán y la actual chef del restaurante Panpintao de Pinto, Irene Muñoz.

Hablar con Rubén es una delicia. Sin apenas darnos cuenta, los chascarrillos que tanto nos gustan a los “pinteños de toda la vida” salpican una y otra vez la conversación, que transita hacia su último capítulo. El tiempo nos devora, pero antes de despedirnos, Rubén López nos confirma que regresará a Pinto en abril, aunque solo será de vacaciones, ya que su hogar, junto a su mujer y su hija, por el momento sigue siendo su casita de campo en su particular “Rioja australiana”, Orange (región centro oeste de Nueva Gales del Sur). Un lugar donde, al final de la conversación, los pájaros siguen cantando. Sensaciones superlativas para una charla que, sin duda, continuará.
Desde la redacción de ePinto enviamos un abrazo enorme al chef pinteño Rubén López Mesa y le agradecemos todas las facilidades que siempre nos brinda para seguir compartiendo sus hazañas en el mundo de la gastronomía. Eres un orgullo como vecino y uno de los mejores embajadores que Pinto puede tener en Australia.
Nos vemos por las calles de Pinto.